COMBAS: JORNADA FINAL DE 2011.

Pues parece que fue hace poco cuando empezamos a conocernos y a plantearnos qué era es0 del Programa de Consolidación de Competencias Básicas para el que nos habían seleccionado a algunos centros. Fue un 18 de enero de 2011 en Málaga y, desde entonces, ha crecido una comunidad de profesionales y centros que junto a los de otras comunidades autónomas nos hemos convertido en la COMUNIDAD COMBAS que se identifica, más que por un modelo de desarrollo de las competencias básicas, por un deseo, una voluntad, una ilusión y una esperanza de consolidar el trabajo por competencias en nuestros centros. Es cierto que cada centro y cada profesional viene de una trayectoria diferente y que puede, también, que sigamos caminos distintos, pero todos y todas tendremos ese núcleo común, ese marco general del que se ha hablado en la jornada final de hoy, que utilizaremos contextualizándolo en nuestro centro. 

La Jornada Final de hoy ha sido una jornada de certidumbres y promesas, de reencuentros y de celebración por lo trabajado. 

De certidumbres porque se ha demostrado lo que ya barruntábamos, que la experiencia ha sido muy útil y muy fructífera y que ha servido para crear una red de centros que en forma de cascada y, a la vez, de manera horizontal, empiece a extender con más fundamento el desarrollo de las competencias básicas. 

De promesas porque se apuesta por seguir; por Europa, por las Comunidades Autónomas y por el trabajo ya realizado y su buen resultado. Sin embargo, esas promesas, en medio de una incertidumbre política y económica importante, no ha terminado de calar entre los presentes (al menos con los/as que he hablado). Sabemos que hay que seguir, pero no las tenemos todas con nosotros de que sea así, o de cómo vaya a desarrollarse la segunda fase del año 2012. 

De reencuentros por volver a compartir experiencias y vivencias con profesionales que ya hemos convivido en varios momentos del curso pasado y también, como no, se han echado de menos a compañeros y compañeras que no han podido acudir o que ya, simplemente, no están. 

De celebraciones por la Feria de materiales que han montado las distintas comunidades autónomas mostrando el gran trabajo realizado. También se nos ha planteado la realización de una GUÍA DIDÁCTICA COMPARTIDA, con materiales de todos los centros y que sirva de referencia para los demás. En este terreno, me gustaría mencionar a uno de los centros de referencia que han expuesto hoy su trabajo: el CEIP Félix Rodríguez de la Fuente de Los Palacios, con el que me une un lazo afectivo-profesional por haber puesto mi humilde granito de arena en su crecimiento como centro clave en el trabajo de las competencias básicas en el ámbito nacional y con el que estoy en deuda por haberme enseñado cómo se puede avanzar a pasos agigantados en este terreno. 

Al mismo tiempo se nos ha planteado la tarea que parece ser nos va a ocupar a los antiguos centros A2, ahora A3, en este año: el desarrollo del Plan de Mejora y la implicación de las familias en el desarrollo de las competencias. Alguno ha planteado que “el caballo de batalla de los centros A3 debería ser la evaluación”. Y sobre esto me gustaría dar mi opinión. Sigo afirmando, y cada vez lo veo más claro, que el problema de las competencias básicas no es la evaluación sino su programación y su trabajo en el aula. Porque mientras consideremos las competencias como un añadido a lo que ya hacemos seguiremos inventándonos tablas, herramientas, instrumentos, o lo que sea, muy dignos, muy trabajados, con porcentajes, ponderaciones y operaciones inverosímiles que se plantean como una ayuda al profesorado pero que lo que hace es alejarlo, por su complejidad, del verdadero trabajo de las competencias en el aula. Al final, todo eso es una quiniela que rellenaremos al buen tun tun para hacerla coincidir con la nota del examen, de SENECA o de la evaluación…y poder seguir haciendo lo mismo de siempre. 

Pero no quiero terminar mi resumen de la sesión con una queja o una impresión equivocada. Queda mucho por hacer, se ha hecho mucho y hay mucha ilusión docente para llevarlo a cabo. Y, sobre todo, grandísimos profesionales implicados en el desarrollo de las competencias básicas. 

Hasta Pronto.